Un amigo director de fotografía me envió este interesante artículo sobre este nuevo nicho de producción. En principio, supongo que mi amigo leía el artículo porque destaca las ventajas de la novedosa cámara Canon EOS 7D (que ya ha sido reseñada en Blogacine). Sin embargo, pronto el artículo va en otra dirección y comenta la importancia del nicho de los "webisodes" o episodios para Internet, no como producción independiente, sino como presencia en la red de algún programa determinado original de la televisión u otro medio más tradicional (y por tanto, más rentable).El artículo hace referencia particular al caso de la serie de HBO True Blood, que en la actualidad produce episodios exclusivos para la red y así lograr más presencia. ¿Será esta modalidad una alternativa para la rentabilidad de la producción para Internet? ¿Creen que los webisodios tendrían cabida en el mercado venezolano y/o latinoamericano?
Internet acá ha tenido una evolución algo lenta en relación con otros países. Aunque cabe el dicho de "lento pero seguro"
ResponderEliminarEn 2006 trabajé en una emisora radial por internet, y lamentablemente era bastante difícil captar al público, porque no mucha gente estaba interesada en esas modalidades. Creo que el principal asunto de internet es que la gente quiere poder escuchar o ver lo que le gusta cuando quiera y como quiera, muy por el contrario de las modalidades televisivas.
De hecho, la tele se ha ido más hacia esos rincones con la modalidad de video on demand (que es como el alquiler de películas pero digital en la tv por cable) y la posibilidad de retroceder grabar y pausar la programación.
Los webisodes pueden tener su target, especialmente en el público joven y joven adulto, que prefiere la computadora y el poder de decisión sobre sus horarios.
Yo también trabajé un tiempo editando episodios para un portal venezolano. Lamentablemente el asunto acá sigue sin ser rentable, aunque creo que podría funcionar bajo esta figura de ser "el hermano menor" de alguna empresa grande. Además, con los obstáculos que se enfrentan los medios tradicionales en la actualidad, tal vez aceleren su migración a la red. Saludos.
ResponderEliminar